Después de lo bien que lo pasé el día de su boda, ahora tocaba su postboda. Era un día para disfrutar, dejar fuera los nervios y pasarlo bien... Y es lo que hicieron. Nos deleitaron con todo tipo de momentos de complicidad, besos, abrazos y siendo en definitiva, ellos mismos. Y todo esto en un marco tan ideal como lo son las playas de Huelva, un lugar para dar rienda suelta al amor de Patry y Ángel.